De a poco sus manos se dieron al pulso de un lápiz.
punto de partida, de inicio, el salto en el aire...
ocasiona en mi un gran eco que revuelve y revuelve mi sangre,
estoy batida, me agita el agua hacia los riscos.
Un día no muy lejano quise brincar, quise ir por ese paraíso imaginario
donde las luces se apagan para ver lo oscuro y ver la luz pequeñita haciéndose cada vez mas grande, calentando mi pecho.
No sé cuanto tengo que escribir esta vez. mi libro a sido un sueño.
entre las hojas y ramas secas la brisa húmeda de madre tierra...cortan mis raíces unos gigantes, se hacen pequeños gnomos, y me llevan a los brazos de morfeo.
Sueño, hablo en idioma, pinto un cuadro, danzo con mujeres, aprendo ingles y me levanto con fuerza.
fortaleza llama la llama del fuego sagrado, guardado en el corazón del vientre mío, madre.
Padre que miente sin decir con hablar sin callar con soledad. Las verdades se ocultan ante mi y juega el duende de la risa para que yo le siga el cuento.
Yo no me pongo risueña, se me enredan los rulos y las serpientes salen de mi boca, víbora con alma. te has puesto el traje de hojalatas, armadura para se dura en los tiempos duros.
llora sin respiro, otoño cae con las hojas, otoño caigo en tu fuente de trapos viejos, oxidados de uso antiguo, tierra antigua me convierto en arcilla y soy una urna para todos tus muertos.
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